La religión de Mahoma recibió el nombre de Islam o Islamismo, que quiere decir abandono a la voluntad de Dios.
Los creyentes se llaman musulmanes (resignados) y no mahometanos como por error se los designa.
La doctrina musulmana está contenida en el Corán (Alcorán), libro sagrado que resume las enseñanzas y relatos del profeta, escritos por sus discípulos preferidos; fue publicado después de su muerte.
Para los árabes, el Corán es algo más que una fuente de teología, pues contiene preceptos morales, disposiciones civiles, políticas y administrativas. La obra está compuesta por 144 suras (capítulos) subdivididos en versículos.
Los principales fundamentos del Islamismo son:
a) Unidad de Dios (monoteísmo). Alà es el supremo creador y se comunica con los hombres por medio de profetas, de los cuales Mahoma es el último y el más importante.
El credo se expresa diciendo: No hay más que un Dios, Alà y Mahoma es su profeta.
b) Inmortalidad del alma. Después de la muerte, el alama de los justos penetra en el paraíso de Alá, y la de los pecadores se hunde entre las llamas con el demonio. Los goces y dolores son de naturaleza material. El islamismo admite la resurrección de los muertos en el día del juicio final.
c) Fatalismo. Pero el hombre es bueno o malo, no por su voluntad, sino porque así lo dispone Dios anticipadamente. De esta manera, todo está escrito de antemano.
El individuo se halla predestinado y el fatalismo (lo que fatalmente sucederá) flota sobre sus actos.
Dios desde la eternidad ha decretado todos los actos, todos los sucesos del hombre; todo está escrito en el libro de la evidencia; los infieles estaban predestinados para el fuego; el hombre lleva su destino pendiente del cuello y en el día de la resurrección, Dios le mostrará el libro abierto.
El culto islámico obliga a los creyentes a la siguientes prácticas:
La oración. Debe rezar cinco veces al día dirigiendo la mirada hacia la Kaaba. Antes tiene que purificarse, levando el rostro y las manos con agua o arena. El creyente se arrodilla y toca el suelo con la frente repetidas veces.
El ayuno. Es obligatorio durante todo el mes de Ramadán (abril). No puede comer ni beber hasta que desaparece el sol.
La limosna. Según los musulmanes, la limosna favorece la entrada en el paraíso.
Peregrinación a La Meca. Debe ir en peregrinación a ese ciudad, al menos una vez en la vida. Allí cumplirá con el ritual tradicional.
El islamismo no eliminó por completo las prácticas y principios de la religión primitiva, pero logró la unidad política y religiosa de los árabes que, fanatizados por su nueva fe, se lanzaron sobre los otros pueblos y fundaron un gran imperio.
Para elaborar su doctrina, Mahoma se inspiró en los principios del judaísmo y cristianismo. La vieja idolatría fue remplazada por el dios único y omnipotente. Predicó la igualdad, la fraternidad y exigió la limosna. Además, prohibió a sus fieles los juegos de azar, comer carne de cerdo y embriagarse-
Sin embargo, toleró la poligamia, el concubinato y la esclavitud; estimuló la guerra santa, pues prometió el paraíso a los que dieran su vida en la lucha contra el infiel.
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